Es una de las preocupaciones más extendidas: ¿La salida de los dientes en los bebés causa fiebre? 😲
La dentición puede ser un proceso desalentador tanto para tu bebé como para ti. El peque se puede sentir incómodo porque tiene molestias en la boca y los padres pueden no saber cómo proceder ante tal situación.
Por este motivo vamos a intentar ponértelo lo más fácil posible, para que tú y tu bebé podáis transitar por este periodo, con toda la tranquilidad y la información a vuestro alcance.
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¿Puede la salida de los dientes causar fiebre en un bebé?
Vamos a atajar el problema de raíz.
Existen muchos mitos alrededor del desarrollo de la dentición en los bebés. Uno de los más generalizados es que la salida de los dientes puede causar fiebre.
La realidad es bien diferente. No hay ningún estudio que haya podido demostrar que la dentición cause directamente fiebre al salir.
Por lo tanto, un primer dato importante a tener en cuenta es que, si tu bebé llega a tener más de 38º de fiebre coincidiendo con la salida de sus dientecitos, será por otro motivo ajeno a la dentición, que ha coincidido en espacio y tiempo. En este caso, la opción más recomendable siempre es la de consultar a su pediatra o médico de cabecera.
Lo que sí que puede ocurrir es que notes que el peque sufre un pequeño aumento de su temperatura corporal. Esto podría ser debido a que las encías están más sensibles y un poquito inflamadas, debido a la irrupción de los primeros dientes.
En cualquiera de los casos, sólo debería tener febrícula y no pasar a mayores.
Cómo cuidar los dientes de tu bebé
Desmitificado el punto más preocupante, es muy importante tener en cuenta técnicas para aliviar el dolor que pueda tener el bebé durante el proceso de dentición, así como conocer métodos para cuidar los dientes del pequeño desde sus primeros meses.
Consejos para aliviar las molestias cuando le salen los dientes al bebé
Durante la salida de los dientitos es muy común que aparezcan incomodidades y molestias en el bebé.
Inflamación de las encías, babeo constante, irritabilidad o insomnio son ejemplos muy frecuentes en este periodo.
Te recomendamos algunas acciones y consejos que puedes aplicar para aliviar estas molestias:
- Lava la cara de tu bebé para eliminar el exceso de babas, evitando así la aparición de sarpullidos fruto de la irritación de la piel.
- Realiza al peque un masajito sobre sus encías con tu dedo. Puedes probar también con una cucharita fría, pero házlo con mucho cuidado.
- Muéstrale un objeto adecuado para que el bebé pueda morderlo y así aliviar su dolor. Ten en cuenta que no sea de un material que pueda romperse en trocitos pequeños, y que sea un juguete grande como para que no se pueda atragantar.
Lo puedes intentar con el chupete, dejándolo en la nevera por un ratito para luego introducirlo en la boca.
- Si el bebé tiene dolor e irritabilidad por un periodo largo de tiempo, puedes consultar con el pediatra si es conveniente darle o no una dosis adecuada de algún analgésico (siempre y cuando el peque tenga más de 6 meses de edad).
Acciones a evitar
Aquí te indicamos algunas recomendaciones sobre acciones que no son convenientes para el peque:
- No le frotes las encías con alcohol.
- Mejor no darle geles o pastillas para la dentición.
- No colgarle ni atarle al cuello accesorios como los aros de dentición. Podría engancharse con algún objeto con el consiguiente peligro de que el peque se estrangule.
- Puedes probar a darle alimentos fríos o helados si tu bebé ya está comiendo sólidos (bien porque ya es algo mayorcito, o porque habéis iniciado la alimentación complementaria con el método del Baby Led Weaning (BLW).
Cuida los dientes de tu bebé
El cuidado ideal de los dientes del peque comienza antes que le salgan los primeros dientitos de leche. Que no hayan sacado la cabeza no significa que los dientes no existan.
Para que te hagas una idea aproximada, cuando nace el peque ya tiene 20 dientes en su boca.
Puede ser de bastante utilidad seguir estos consejos para preservar la salud de los dientes de tu peque:
- Antes que le empiecen a salir los dientes, pásale una gasa por las encías. Así evitarás que se formen nuevas bacterias.
- Cuando ves que ya le están saliendo, puedes cepillarlos con un cepillo para lactantes.
A partir de los dos años, ya puedes usar una pequeña cantidad de pasta de dientes con flúor (asegúrate que lleve algún sello de calidad contrastada) mezclada con agua.
Es importante que no te excedas con la cantidad de pasta, tienes que tener en cuenta que los bebés tienden a tragar. Hay que controlar bien (o intentarlo) que no se traguen el dentífrico, y que tenga la cantidad de fluor recomendada por edad (la menor posible).
- En el momento en que sus dientes se toquen entre sí, puedes empezar a utilizar el hilo dental.
Evitar las caries
Algo que pasa desapercibido para muchos padres es el hecho que los bebés pueden desarrollar caries dentales desde el principio de su vida si no siguen una buena alimentación, sumado a un buen cuidado dental.
Un ejemplo muy claro es evitar que tu bebé se quede dormido succionando la tetina del biberón. Aunque lo quieras utilizar como un recurso para que se quede dormidito, hay que tener en cuenta que el azúcar del jugo de la leche puede dañar el esmalte de los dientes. Se conoce como “boca del biberón” (también se le llama “caries del lactante”).Es un padecimiento común en los recién nacidos, que provoca que los incisivos del peque se piquen y se formen hoyuelos.
Además, los bebés no deberían ingerir nada con azúcar antes de los dos años. Y pasado este tiempo, lo ideal sería eliminar de su dieta los alimentos con mucho azúcar, como las golosinas. Esto evita el riesgo de que se erosione el esmalte facilitando la aparición de caries.
En resumidas cuentas: recuerda que la salida de los dientes NO causa fiebre directamente.
Esperamos que estos consejos te ayuden para que tu peque tenga una salud dental de hierro. 💪😊
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